Translation for "de la cena" to english

De la cena

adjective

• prandial

Translation examples

prandial adjective

En el curso de sus paseos de después de la cena, padre e hijo llegaban muy lejos y apenas descansaban.
In the course of their post-prandial wanderings, father and son ranged far and sat little.

Una bandeja de copas para después de la cena estaba orbitando la mesa, pero Vimes no la había tocado, porque Sybil se molestaba.
A tray of post-prandial drinks was orbiting the table, but Vimes hadn’t touched it, because it upset Sybil.

La cena comunitaria del Día de la Interdependencia de mañana es un gran evento en la AET, e incluye por lo general un sombrero especialmente elegido para cada uno, postre de verdad y una película posprandial de Mario y, a veces, canciones colectivas.
Tomorrow’s Interdependence Day communal supper at E.T.A. is a big deal and includes each person’s own specially selected hat, plus real dessert, and a post-prandial Mario-made film, and sometimes a sing-along.

—Retrasamos la cena —dijo Henrietta— con la esperanza de que te diera tiempo a llegar, pero luego tuve que alimentar a esta bestia hambrienta —hizo un mohín burlón en dirección a su prometido que pululaba sin chaqueta detrás de ella—, por eso nos encuentras con nuestro habitual desaliño de después de comer.
“We held dinner,” Henrietta said, “in hopes that you might still come, but then this great hungry beast”—she cast a mock scowl in the direction of her fiancé where he hovered jacketless behind her—“had to be fed, and so you find us in our dishevelled post-prandial state.”

La manera en que me hizo a continuación su pregunta me llevó a pensar que le urgía hacérmela por algún motivo o que le escocía desde hacía ya un rato en la lengua, no era mero pasatiempo ni pertenecía al vaivén casual de una charla, a los comentarios posteriores que se propician o imponen siempre al acabar una cena o una fiesta, cuando todos se han ido o es uno el que se ha marchado con alguien.
The manner in which he asked his next question led me to believe that he was, for some reason, driven to ask it or that it had been on the tip of his tongue for a while, it clearly wasn’t just a way of passing the time nor did it belong to the chance to-and-fro of conversation, to the post-prandial comments that arise or assert themselves at the end of a supper or a party, when everyone has gone or when you are one of those to have left the party along with other guests.