Translation for "faire visiter" to spanish

Faire visiter

• hacer visitar
• hacer una visita

Translation examples

hacer visitar

Il eût été amusant de faire visiter à un boutiquier de la Regent Street du XIXe siècle les agrandissements de son primitif établissement dans lequel Denton était employé.
Habría sido divertido hacer visitar a un tendero de la Regente Street del siglo XIX los ensanches de su primitivo establecimiento, en el cual estaba empleado Denton.

L’appartement occupait tout l’étage et Mme Sabin-Levesque, toujours mal assurée sur ses jambes, commençait par faire visiter la partie qui était la sienne.
El apartamento ocupaba todo el piso y la señora Sabin-Levesque, siempre poco segura sobre sus piernas, comenzaba por hacer visitar la parte que era la suya.

hacer una visita

Ce soir-là, M. Leterrier vint faire visite à M. Bergeret.
Aquella noche, el señor Leterrier quiso hacer una visita al señor Bergeret.

— Et donc… tu vas rester planté là toute la soirée ? Ou est-ce que tu vas me faire visiter ?
—Oye…, ¿vas a quedarte como un pasmarote toda la tarde, o me vas a hacer una visita guiada?

Quand je cherche, à la tombée du jour, ma dinde égarée, je me sens attiré vers Le Bon Port pour faire visite aux Pribytko.
Antes del anochecer, mientras busco a la pava extraviada, me dan ganas de pasar por Puerto Tranquilo, de hacer una visita a los Pribytki.

— Oui, mon père, reprit Dantès, et, avec permission, maintenant que je vous ai vu, maintenant que je sais que vous vous portez bien et que vous avez tout ce qu’il vous faut, je vous demanderai la permission d’aller faire visite aux Catalans.
—Sí, padre mío —replicó Dantés—; y con vuestro permiso, pues ya que os he visto, y sé que estáis bien y que tendréis todo lo que os haga falta, si no os incomodáis, iré a hacer una visita a los Catalanes.

Quelques jours après cette rencontre, Albert de Morcerf vint faire visite au comte de Monte-Cristo dans sa maison des Champs-Élysées, qui avait déjà pris cette allure de palais, que le comte, grâce à son immense fortune, donnait à ses habitations même les plus passagères.
Transcurridos unos días, después del encuentro referido en el capítulo anterior, Alberto de Morcef fue a hacer una visita al conde de Montecristo, a su casa de los Campos Elíseos, que había adquirido ya el aspecto de palacio que acostumbraba a dar el conde de Montecristo aun a sus moradas más provisionales.