Перевод для "dormions" на испанский

Dormions

• estábamos durmiendo
• estaban durmiendo

Примеры перевода

estábamos durmiendo

Nous dormions avec les fenêtres fermées.
Estábamos durmiendo con las ventanas cerradas.

Nous dormions, Gino et moi, lorsqu’on a frappé à la porte.
Gino y yo estábamos durmiendo cuando llamaron a la puerta.

Nous dormions tous, près de nos navires, vaincus par la fatigue.
Todos estábamos durmiendo, junto a nuestras naves, vencidos por el cansancio.

Pendant que nous, bien repus, nous dormions tranquillement dans nos lits.
Y nosotros durmiendo en nuestras cómodas camas después de una buena cena.

— Personne n’a prévu que nous dormions pendant soixante-dix ans malades !
—¡Nadie había previsto que pasáramos setenta años durmiendo por enfermedad.

Moins d’une heure plus tard, j’étais de retour à l’appartement et à dix heures et demie, nous dormions tous les deux.
Volví al apartamento al cabo de una hora y a las diez y media los dos estábamos durmiendo.

Grand-père et moi séjournions chez tante Marian, à Alamogordo ; nous dormions dans sa chambre d’amis, nous mangions à sa table.
Nos habíamos quedado en casa de la tía Manan en Alamogordo, el abuelo y yo, durmiendo en su habitación de invitados y comiendo a su mesa.

Quand nous eûmes nos draps et nos couvertures, cela nous sembla le comble du luxe car il y avait cinq ou six semaines que nous dormions sur les branches de sapin.
En cuanto tuvimos nuestra ropa de cama, nos sentimos en la gloria, porque llevábamos cinco o seis semanas durmiendo sobre las ramas de tuya.

Nous nous sommes battus privés de rations, nos bottes partaient en lambeaux, nous dormions deux ou trois heures par nuit et mourions chaque jour par milliers.
Luchamos sin comer, con las botas destrozadas, durmiendo dos o tres horas por noche y muriendo a miles cada día.

D’on ne sait où, dans les petites heures noires, tandis que nous dormions dans les bras l’un de l’autre, l’alarme éclata : un bruit fracassant de cloches et de sirènes.
En algún momento, durante las horas nocturnas, mientras estábamos durmiendo uno en brazos del otro, se puso en funcionamiento la alarma: un estruendoso sonido de campanas y sirenas.