Traduction de "regimientos de dragones" à anglaise

Regimientos de dragones

• dragon regiments
• dragoon regiments

Exemples de traduction

dragon regiments

El segundo batallón del regimiento de dragones de Salt Lake City está arrestado.
The second battalion of the Dragon Regiment at Salt Lake City is under arrest.

dragoon regiments

Gideon ya había oído hablar de aquel regimiento de dragones.
Gideon had already heard of this dragoon regiment.

Incluso los regimientos de caballería se habían retirado, el 11o a la fuerza de oposición, o «malos chicos», en el Centro de Entrenamiento Nacional y el 2.0 Regimiento de Dragones había sido esencialmente desarmado en Fort Polk, Louisiana, en un intento por crear una nueva doctrina de tropas sin armas.
Even the cavalry regiments were gone, the 11th to be the OpFor -- “opposing force,” or Bad Guys -- at the National Training Center and the 2nd “Dragoon” Regiment essentially disarmed at Fort Polk, Louisiana, trying to make up new doctrine for weaponless troopers.

Se decidió por tres hombres de probado mérito en la batalla: tres oficiales del regimiento de Dragones de Lobkowitz, así como por un secretario de la Consejería de la corte imperial llamado Karl von Doder, el cual había visto actuar al célebre bufón veinte años atrás, en un mercado de Neulengbach, donde, como era típico del cómico, le había gastado una broma muy pesada a una mujer del público a resultas de la cual se había desencadenado una tremenda pelea de cuchillos que, naturalmente, había divertido muchísimo a quienes no se habían visto afectados, porque siempre sucedía lo mismo: algunos quedaban malparados, pero los que salían ilesos se lo habían pasado en grande. Al principio, el secretario no quería ir y buscó argumentos, rogó y suplicó y alegó una fobia insuperable a la violencia y a las inclemencias del tiempo, pero no le sirvió de nada: una orden era una orden y así hubo de plegarse a ella.
He chose three battle-tested men from the Lobkowitz dragoon regiment along with a secretary of the Imperial Court Council, Karl von Doder, who had seen the famous jester twenty years earlier at a market near Neulengbach, where the man, as was his way, played a very dirty trick on a woman in the audience and afterward provoked a bad knife fight, to the delight, naturally, of those who were not affected by it, for so it always was when he appeared: Some fared badly, but those who got away enjoyed themselves immensely. At first the secretary didn’t want to come with him. He argued and begged and pleaded and cited an unconquerable abhorrence of violence and of bad weather, but all to no avail. An order was an order;