Traducción para "receveur" a español

Receveur

• recipiente
• receptor
• beneficiario
• recibidor
• el que recibe

Ejemplos de traducción

receptor

C’est moi qu’entraîne les receveurs. »
Soy el preparador de los receptores.

Ou tu es un donneur ou tu es un receveur.
O eres donante o eres receptor.

Ce ne serait pas bon pour les receveurs.
No es bueno para los receptores.

C’était mieux pour le receveur.
Para el receptor era mejor así.

Chez le receveur, c’est le droit.
En el receptor es entonces el derecho.

quant au receveur : le fils du marchand de glace.
El receptor de Lenny, el hijo del repartidor de hielo.

Avec beaucoup moins de risques pour le receveur qu’à Istanbul.
Una situación con muchos menos riesgos para los receptores que en Estambul.

Reprenant le receveur, il lança d’une voix coupante :
Tomó de nuevo el receptor y pidió, hosco:

Mais que se passe-t-il s’il s’oppose ardemment au choix du receveur ?
Pero ¿qué ocurre cuando está en completo desacuerdo con la elección del receptor?

On pourrait avoir une place libre comme receveur.
—Puede que tengamos un puesto de receptor, primer catcher.

el que recibe

Ceux qui insistent pour avoir des ordres clairs ou qui veulent des mesures législatives n'ont pas compris que c'est la volonté du chef et non ses ordres qui comptent, et que c'est au receveur d'ordres de savoir déchiffrer et même anticiper cette volonté.
Quienes insisten para que les den órdenes claras o piden medidas legislativas no han entendido que lo que cuenta es la voluntad del jefe y no lo que ordena, y que quien recibe las órdenes es quien tiene que saber descifrar esa voluntad e incluso anticiparse a el a.

Croyant peu au succès de sa publication sur la Chine, ils avaient fini par persuader au propriétaire de la maison que monsieur d’Espard était sans argent, au moment même où, par un oubli que commettent beaucoup de gens occupés, il avait laissé le receveur des contributions lui envoyer une contrainte pour le payement de sa cote arriérée.
Creyendo muy poco en el éxito de su publicación acerca de la China, el vecindario acabó por persuadir al propietario de la casa de que el señor de Espard no tenía un cuarto, en el momento mismo en que, por un olvido que cometen con frecuencia las gentes ocupadas, había permitido que el administrador de contribuciones le enviase un segundo aviso para que efectuase el pago de recibos atrasados.